La bella Italia, tan vasta y diversa. Es difícil no enamorarse de este país porque de verdad, tiene de todo.
En el norte puedes encontrar las preciosas ciudades y pueblos que atraen a tantos turistas. Algo más al sur, encuentras la cuna del Imperio Romano, de donde la civilización europea creció hasta lo que es hoy en día. Y en la parte más alejada de la bota, puedes visitar las playas tropicales que te harán creer que estás en el Caribe.
Pero la naturaleza en este país tampoco se queda atrás. Vastos bosques, formaciones montañosas gigantescas y por supuesto las tantas islas paradisíacas. No olvides visitar algunas de las islas también.
Italia es uno de los lugares más bonitos de Europa, y podrás ver toda su diversidad al viajar a Italia.
Costes medios de viajar a Italia
Estancia – El precio por una estancia de una noche en Italia no es demasiado caro. Cuanto más al sur vas, más baratos serán los precios. En las ciudades más turísticas (incluyendo Florencia, Roma, Venecia…) los costes son, obviamente, mayores. Una habitación doble cuesta al menos 40€. Un hotel de cuatro o cinco estrellas comienza por 200€ o 300€. ¿Te sirve un hostal o un albergue? En estos sitios, los precios rondan los 20€. Los campings alrededor de algunas ciudades son incluso más baratos: en ocasiones, puedes dormir en una tienda por menos de 10€ por persona.
En el sur (Napoles, Sicilia…) los precios son mucho más baratos. Un hotel de cuatro o cinco estrellas cuesta entre 70€ y 200€. Puedes encontrar hoteles baratos por 25€ o 30€, y los albergues tienen un precio de salida de 12€.
Comida – Si estás de vacaciones y decides viajar a Italia, por supuesto deberías probar la comida típica de allí: pastas, pizzas y otras especialidades locales. No tienes que temer el precio del restaurante, porque normalmente son bastante asequibles. Las pizzas normalmente son los más barato. Una simple pizza margarita cuesta entre 5€ y 10€; una pizza con algo más de ingredientes estará entre los 7€ y los 15€. Las pastas suelen comenzar en 10€, y dependiendo de los ingredientes, el precio puede subir hasta casi veinte euros. Un postre costará entre 4€ y 7€.
Si no quieres gastar mucho en restaurantes, puedes comer más tarde. Normalmente tendrás un entrante, un plato principal y bebida por unos 15€. No olvides que en Italia es obligatorio dejar propina – normalmente, es de 2€ por persona, pero en ciudades más grandes, pueden exigirte hasta 6€ más…
Transporte – El transporte público no es caro en Italia. Normalmente, un billete de bus o metro cuesta entre uno o dos euros. Si lo que quieres es tomar un tren a otra ciudad, es recomendado sacar los billetes con antelación. Puedes ahorrar hasta un 50% si reservas tu billete con tiempo.
En lugar de tren, también puedes coger un autobús de larga distancia. Estos son muchos más baratos e igual de cómodos, pero tardarán un poco más en llegar al destino.
Ahorrar dinero
Almuerza más tarde – En lugar de almorzar al mediodía, puedes esperar un poco más a principios de la tarde. A esas horas, los restaurantes ofrecen comidas por menos de quince euros por persona. Por ese precio, podrás disfrutar de un entrante, plato principal y bebida; a veces incluso postre.
Bebe el vino de la casa – Muchos restaurantes ofrecen vinos de la casa en la comida. Estos son mucho más baratos que las otras bebidas de la carta, y la mayoría son deliciosos.
Bebe agua del grifo – Si vas a Italia durante la primavera, el verano o incluso otoños, las temperaturas pueden ser muy elevadas. Por lo tanto, es necesario que bebas suficiente agua. En lugar de comprar nuevas botellas de agua cada cierto tiempo, rellénalas con agua del grifo. Es más barato, y también mejor para el medio ambiente.
Reserva billetes y excursiones online – Italia tiene algunas de las mayores atracciones turísticas del mundo. Como resultado, normalmente tendrás que esperar bastante antes de conseguir un ticket de admisión, y como bien sabes: ¡el tiempo es oro! Reserva tus billetes online y sáltate las largas colas.
Qué hacer al viajar a Italia
Escala volcanes – El territorio de Italia está repleto de paisajes creados por la lava de volcanes. Afortunadamente, la mayoría de ellos están ya inactivos y puedes visitarlos. Cerca de Nápoles se encuentra el Vesubio, y en Sicilia puedes ver el mítico Monte Etna. ¿Te gustaría ver volcanes activos? Entonces ve a las islas Stromboli. Casi todas las noches puedes ver un espectáculo natural en el que algo de lava sale de estos volcanes.
Visita las islas – Italia tiene docenas de islas y casi todas ellas son igual de bonitas. Sicilia y Cerdeña son las islas más grandes y conocidas, pero las islas más pequeñas son normalmente más acogedoras y paradisíacas. Cuando viajes a Italia, asegúrate de visitar las islas Eolias y Egadas, las islas Flégreas, las acogedoras islas de la laguna de Venecia, e incluso las hermosas Elba y Lampedusa.
Catedrales, iglesias y capillas – Europa está repleto de edificios eclesiásticos, pero casi ninguno de ellos es tan impresionante como los que puedes ver en Italia. Incluso las ciudades más pequeñas tienen catedrales o iglesias ricamente decoradas.
Pompeya – Pompeya es simplemente impresionante. La ciudad fue enterrada bajo la lava y polvo del monte Vesubio en el 79 d.C. Como resultado, esta ciudad romana está muy bien conservada. Quedarás impresionado por lo grande y bonita que es esta ciudad, pero también aprenderás más sobre la triste historia que aconteció en la ciudad.
Cinque Terre – Cinco pequeños pueblos de coloridas casas, rodeados de rocas, laderas, el mar y mucha vegetación. Así se podría describir Cinque Terre. Este lugar idílico es el paraíso para excursionistas, amantes de la naturaleza y fanáticos de los pueblos pintorescos. Llévate tus zapatillas de caminar, porque desde los senderos empinados es donde se obtienen las mejores vistas posibles de este lugar de ensueño.
Comida italiana – Llénate de deliciosas pastas y demás delicias. Casi todo lo que pruebes en Italia te sorprenderá. Asegúrate de probar las especialidades locales. ¡Te sorprenderá la cantidad de manjares que tiene este país!
Qué no hacer en Italia
Hacer cola para comprar entradas – Mucha gente se acumula en las entradas de las atracciones turísticas, creando interminables colas. Si reservas tus entradas con tiempo ya sea a través de la web oficial o agencias de viaje, podrás saltarte estas colas. Normalmente, no pagarás ningún extra, y no tendrás que perder tiempo.
Perder la paciencia por la mala señalización – Hay muchos turistas que deciden viajar a Italia, pero eso no parece importarles a los italianos: hay una falta de indicaciones hacia donde están localizadas las atracciones turísticas. Las señales e indicaciones hacia algunas atracciones turísticas, en ocasiones, hacen que sea incluso más confuso para los turistas. Tienes que revisar todo con tiempo o puede que no llegues a tiempo.
Llevar ropa inadecuada – Italia tiene cientos de iglesias y demás edificios religiosos. Para entrar en estos, debes cumplir un cierto código de vestimenta. Asegúrate que tus hombros y rodillas están cubiertos, o no te dejarán entrar.
Caminar con una tarrina de helado – Puede parecer una tontería, pero esto los italianos se lo toman muy enserio. Si quieres pasear mientras disfrutas de un delicioso gelato, este debe estar en cono; para comer helado en tarrina, debes estar sentado. Así que no te sorprendas si un italiano indignado se te acerca al verte pasear con un helado en tarrina.